Fue
Butler (1969) el autor que dio nombre al conjunto de actitudes negativas hacia los ancianos y el proceso de
envejecimiento como Ageism o Viejismo
traducido al castellano. Viejismo como el conjunto de actitudes negativas,
socialmente estereotipadas, prejuicios mantenidos por la población en
detrimento de la vejez, la ancianidad y el proceso de envejecimiento como un
ciclo de la vida asociado a enfermedad, padecimientos y soledad.
Como categoriza
Salvarezza (2002) el viejismo es una conducta compleja, determinada por la
población para devaluar consciente e inconscientemente el estatus social de la
ancianidad. Del mismo modo Busse (1968) considera el viejismo como una negativa
y estereotipada percepción del envejecimiento y las personas de edad. Siguiendo
de nuevo a Butler (1969), el contenido de estas actitudes subyacen a un miedo y
rechazo al envejecimiento, a la capacidad de aceptar el proceso de
envejecimiento como una etapa más de la vida, lo que causa una continua
contradicción con los valores narcisistas y eficientes de la juventud.
Los
valores representativos de viejismo, del envejecimiento enfermizo y limitado,
es adoctrinado desde la infancia, periodo crucial para la transmisión de
valores y construcción de percepciones del entorno social. Estos sesgos son aleccionados
de generación en generación a través de la educación familiar, las instituciones
de enseñanza y el entorno.
La
adquisición o no de dichas ideas preconcebidas puede ser alterada con una
visión realista, constructiva y fiel de los modos de envejecimiento normal y
saludable. Salvarezza (2002) afirma en este sentido que la adquisición de
prejuicios tiene lugar durante la infancia, quedando supeditados a la imitación
de modelos parentales y obsoletos de una fuente racional, siendo limitados
únicamente a una respuesta emocional frente a un estímulo concreto. El
resultado de esta ideología fomenta unas actitudes que despiertan rechazo,
repulsión y antipatía.
La
información, la exposición de una etapa desde su punto de vista razonable y
definido, las nuevas pautas del envejecimiento sano y normativo, la
comunicación interprofesional y el abordaje vinculado a hallar fórmulas de acceso
a la vejez menos traumáticas y tranquilizadoras unificarán una acepción
armónica sobre un proceso inevitable, en el cual vivimos desde nuestra
concepción pues todos los días estamos envejeciendo. Y aún no se descubre la “fuente de la eterna juventud”, así que
es hora de brindarle a nuestros adultos mayores el respeto y cuidados que se
merecen.
Moreno-Toledo
A. Viejismo (ageism). Percepciones de la población acerca de la tercera edad:
estereotipos, actitudes e implicaciones sociales. Revista «Poiésis». FUNLAM
2010; 19: 1-10. [Internet]. [Acceso 24 de Noviembre 2012]. Disponible en: http://www.funlam.edu.co/revistas/index.php/poiesis/article/viewFile/101/75.
I completely agree with the final phrase: "It's time to give our elders the respect and careness they deserve". Old people suffer a lot from such rejection and repulsion from so many that it is something to be ashamed of as humans.
ResponderEliminarGreetings Paty! Love your blog...
Gaby de Pablos
Teacher Gaby, thanks a lot for your comment, it was such a great surprise to read your message. I´m really into this project.
EliminarI hope to see you soon.